Los Grandes líderes, los que mueven grandes masas.

Los que vienen a dar un mensaje.

¿Quiénes son estos seres?

Siempre están con nosotros, en toda época.  Grandes seres, sabios, maestros, gente común, guías de masas, seres iluminados, sanadores, creativos, genios, gente ilustre, gente humilde.  Provocan reacciones, despiertan admiración, amor, dulzura, atracción, pero también despiertan crítica, odio, rechazo.

A lo largo de los tiempos han estado entre nosotros.  Algunos los sentimos, logramos una conexión, aprendemos de ellos, nos dejan una enseñanza, nos cambian, nos mueven.  Siempre producen algo en nosotros, aunque no seamos concientes, a veces los ignoramos, los vetamos, los rechazamos porque no los comprendemos, no los entendemos, nuestro ego no logra ver a través de ellos, y al dejarnos llevar por el ego, dejamos de confiar, de tener FE.  Olvidamos nuestro origen divino y no confiamos en nuestro poder divino heredado por todos.

Estos seres confían en su sabiduría que es la sabiduría de Dios, manifiestan esa conexión, trabajan en ello y lo dejan ver a las masas. No tienen miedo de la reacción de la gente, positiva o negativa.  Ellos dan y comunican lo que tienen que decir.  Algunos son iluminados, otros son seres excepcionales cuya misión es servir.  Pero no toda la gente lo entiende, no miran más allá y se dejan guiar por lo que otros dicen sin ir a la fuente de toda respuesta: que es el corazón.

Por tal motivo siempre se encuentran opiniones encontradas de este tipo de seres, algunos son juzgados, criticados, sin darse cuenta que son y somos todos seres de AMOR.

Seres como Jesús, el Cristo; quien fue condenado y juzgado, maestros como Osho, criticados, encarcelados porque no los entendían, sanadores como Bruno Gröning que en su tiempo de vida quisieron negarle la oportunidad de sanar solo porque no pertenecía o estaba certificado para “curar”.  Seres que viven actualmente entre nosotros como Eckhart Tolle y otros guías o instructores espirituales que son criticados en red, solo porque “nuestras ideas” de la vida no van de acuerdo con ellos.  Solo por eso condenamos y maltratamos.

Y todos estos seres, algunos más otros menos, están haciendo su misión, sin miedo.

Mi Reflexión:

Constantemente veo y leo en la red que es muy común criticar y juzgar a tal o cual artista, políticos, famosos, etc.  Hemos caído en ese juego en donde el Amor no se manifiesta.  Ya es el momento de empezar a sentir con el corazón y a ver a todo ser con compasión.  A mirar más allá, a ver con los ojos de los “ángeles”.  A ver la divinidad en todo independientemente de las apariencias, con ello lo que hacemos es enaltecer nuestra parte divina, nuestro verdadero ser de luz, lo hacemos presente y que se manifieste, con esto lograremos manifestar, crear el cielo en la Tierra.

Pero empieza contigo mismo, deja de criticarte, ve el amor en ti y empieza a manifestarlo alrededor.

Con amor, lunara ( y el reino de los ángeles ^_^ )